Sabes lo del latiguillo

     Aunque se suele utilizar en tono de pregunta, he prescindido de los signos de interrogación, sabes, porque doy por hecho que el uso de este latiguillo no es una pregunta sino una tocada continua de narices, hasta el limite de la paciencia del que escucha, sabes.

          Me han agredido tantas veces con el latiguillo que tengo dificultad para situar sintácticamente la pedrada. A veces pienso que se quiere decir sebo, en alusión a lo gordo, sabes, o que me han tomado por catalán y me quieren vender la tortilla de papas con seba (cebolla). Yo he sido siempre muy de seba en la tortilla de papas, sabes. Es un latiguillo cansino hasta lo exasperante, si bien, hay como en casi todo diferencias de gradación en el uso. Desde el casual y comedido, pasando por el pesado hasta llegar al obsesivo y agotador.

         Debe de ser contagioso como un virus, sabes. Conozco gente que nunca lo había usado, y tras un tiempo sin coincidir con esas personas, compruebo que lo utilizan como una metralleta contra toda oreja que se ponga a tiro. Ignoro el fallo en el mecanismo mental del lóbulo temporal que lo produce, o si es un cortocircuito en el Área de Wernicke producto del coronavirus. El caso, sabes, es que resulta muy contagioso.

          No es el único latiguillo molesto que usa la gente al hablar. A mí me resulta de lo más desconcertante ese otro de «me entiendes» (también en tono de pregunta). Yo siempre supongo que detrás de este el que habla también piensa sin decirlo «o eres tonto». Y su variante más agresiva «te enteras», y la sospecha de que se calla el «o eres sordo». Algunas personas conscientes de lo inconveniente del significado lo cambian por el «me explico», pasando la carga de la prueba al sujeto activo. Pero el efecto aunque atenuado es similar a los anteriores, sabes.

          A mí me da que se trata de falta de seguridad del hablante, o por no haber estudiado música y no saber para qué sirven los silencios. Yo compadezco a quiénes tienen algún familiar cercano cada día a su lado soltándole latiguillos sin descanso. Haciéndole mil veces la misma pregunta que no pretende ser pregunta, pero que lleva al que escucha hasta el agotamiento mental.   

             

8 opiniones en “Sabes lo del latiguillo”

  1. Hola, Miguel Ángel. Eres un maestro. Para mí, lo que la juventud de hoy diría… un supermegakingmaestro.
    La verdad, muchas gracias, porque me has descubierto un latiguillo de esos, que inconscientemente yo pronuncio a menudo.
    El mío es ese… ¿verdad? o ¿no?
    Y debo dar la razón a Adela, cuando en su comentario, dice que eso demuestra una falta de confianza en mí mismo, esperando la aprobación del otro. (O algo así. Hablo de memoria, Adela… porque ahora, mientras escribo, no sé como hacer, para repasar tu comentario, anterior).
    Que bueno y por tanto bello es… ¡tener amigos, como vosotros dos!
    Adela y Miguel Angel, gracias…¡¡»Supermegakingmaestros»!!

  2. ¡Qué bueno! Tienes mucha razón, pero igual podemos usar esa baza de los latiguillos cuando escribimos una novela, y emplear alguno de ellos para caracterizar a determinados personajes. Siempre, por supuesto, con mucha moderación y en un discreto segundo plano…
    (Si yo fuera la protagonista insegura y con baja autoestima de mi novela seguramente terminaría mi comentario con un «¿no crees?», para mostrar sin contarlo que soy alguien necesitada de que refuercen mis palabras).
    Eso de los latiguillos es como lo de la inteligencia artificial… Si no puedes vencerlos, únete a ellos…
    («Ya sabes…» 🙏🏻🤣🥰)

    1. Gracias, Adela: me comentaba un colega hace un rato, lo mucho que padece con su hija adolescente que cada dos palabras introduce la muletilla: «en plan». Feliz domingo.

  3. En mi profesión se ulizan muchos latiguillos, como, vale? no? me entiendes? me explico? sí? no te enteras, al final…
    En muchos casos lo he utilizado yo, he intento cada vez más suprimirlos por silencios, y soy muy consciente cuando escucho a otros compañeros dar una clase o ponencia, la cantidad de veces que lo utilizan, con mucha diferencia el vale?
    En mi opinión, es falta de seguridad en lo que se transmite, buscando la aprobación del interlocutor o la reafirmación de lo que se comunica.
    Pero observo ahora una nueva moda, que es contestar a un comentario, con un monosílabo singular, como, literal, 100%, correcto. También me sorprende bastante….buen Domingo de Ramos.

  4. Muy buen Domingo de Ramos nos dé Dios, D. Miguel Ángel.

    Es curioso cómo la vida te devuelve, a modo de boomerang, la cuestión reincidente de los latiguillos. Esa muleta que, como muy bien describes, se recicla con cada generación y evoluciona, sin ser conscientes, para diferenciarse de los anteriores.

    Así, mi Señor Padre, que en paz descanse, era un Quijote sin Sancho que, machacona y persistentemente, guerreaba con sus cuatro hijos vivos durante las tres fases de nuestra adolescencia: pre, durante y post. ¿Tuvo éxito? Creo que sí, que lo consiguió. Al menos, no identifico latiguillos ni en nuestra forma de hablar ni de escribir… Igual estoy equivocado.

    Mas, según leo y escucho a quienes dicen que dicen que saben lo que dicen en cuanto a la Lengua, el lenguaje y sus usos y costumbres, la lengua hablada está en permanente evolución. Y ponen de ejemplo lo que denominan las hablas andaluzas, un laboratorio en permanente ebullición donde se están haciendo continuos experimentos buscando, de forma consciente o no, la mejor vía para expresar distintas situaciones, diferentes sentimientos… Eso es lo que dicen.

    Pero no creo que esto tenga que ver con el uso y aplicación de latiguillos. Me explico. Mis dos hijos, uno de 21 y otro de 19. El mayor sí usa latiguillos. Algunos como los que tú mencionas. El menor, apenas los usa. Alguno de forma muy esporádica. Ambos son personas leídas, cultas para lo que supone su edad, de conocimientos musicales bastante completos (coro, piano, clásica, moderna…). En fin. Personas a las que no les hace ninguna falta el uso y abuso de los latiguillos.

    Sí he percibido que, dependiendo de con quién estén hablando -sobre todo el mayor- tienden a usarlos e, incluso, abusar de ellos. Quizás sea un proceso de mimetismo con quien conversan. porque lo hacen de forma automática. Creo que inconsciente.

    Por tanto, no preocupa en demasía en lo que a ellos se refiere, porque lo considero capacidad de adaptación.

    Otra cosa es aquellas personas -jóvenes entre los n y n+x años- que hacen de este instrumento uso y abuso constante. Ahí he de darte la razón sin reservas.

    Y, por si refuerza tu planteamiento, te pongo el enlace de un Tik-Tok que he visto estos días. Es, a mi.modo de ver, demoledor.

    https://vm.tiktok.com/ZMYVrj8Bt/

    Un fuerte abrazo

    1. Gracias, campeón. La semana que viene sobre la ecolalia. Que tengas una feliz Domingo de Ramos, junto con tu familia y mucha salud. Un fuerte abrazo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *